sábado, 21 de diciembre de 2013

Foo Fighters

Cientos de personas se unieron la noche de este viernes en el coro de la canción Best of You, mientras el vocalista de los Foo Fighters, Dave Grohl, se colocó las manos sobre el rostro, admirado por la reacción del público mexicano, al que visitaron por primera vez en sus casi dos décadas como banda de rock. "Deberíamos de venir cada año a dar un concierto aquí", dijo Grohl en otro de los momentos emotivos de su presentación en el Foro Sol del Distrito Federal, luego de disculparse por haber tardado tanto tiempo en tocar en México. Durante casi tres horas, la banda estadounidense integrada por Grohl, Pat Smear, Taylor Hawkins, Nate Mendel y Chris Shiflett hizo un recorrido por su discografía, desde su material homónimo, de 1995, hasta el álbum Wasting Light, de 2011. Los Foo comenzaron su segundo concierto en México —el primero ocurrió el miércoles pasado— con All my Life, una de sus canciones más poderosas, para luego seguir con Rope y otro tema explosivo en su repertorio: The Pretender. El espectáculo transcurrió sin pirotecnia, efectos especiales, o un gran despliegue de luces. Se centró en la ejecución instrumental de cada integrante de la banda, que optó por tocar versiones extendidas de sus principales éxitos, con largos y potentes solos de guitarra y de batería. La noche incluyó el cóver Young Man Blues, que solía interpretar The Who. El miércoles pasado, los Foo Fighters habían covereado a The Beatles, con Blackbird, y a Pink Floyd, con In the Flesh? “Me gustan los conciertos grandes”, expresó Grohl en otro de los instantes en que habló con la gente, para explicar que en su grupo la parafernalia tecnológica está de más. “Esto es rock and roll”, mencionó el exbaterista de Nirvana, vestido con ropa negra. My Hero, Learn to fly, Break out y Walk siguieron en la lista de canciones. Hasta que en un momento apareció en el escenario una piñata mexicana, que cada uno de los músicos trató de romper, sin mucho éxito en un inicio. "¡Dale, dale, dale, no pierdas el tino!", les gritaba la gente, burlándose por su falta de habilidad. Hasta que Pat Smear usó su guitarra para golpear la piñata, y logró el objetivo de romperla. "¡Amo a Dave Grohl, soy su hija! Me encanta su carisma, me encanta su actitud ante la vida, y me siento identificada con ellos”, comentó una asistente al concierto, bromeando con la idea de que Grohl sea su padre. Big me, These Days y Monkey Wrench formaron parte del cierre de la primera parte del concierto. Entonces el público comenzó a gritar "¡Foo Fighters, Foo Fighters!", y a hacer la ola, para que ocurriera el encore. Grohl reapareció solo, con una guitarra acústica, y tocó Wheels. Minutos después, al escucharse Times Like These, de nueva cuenta la gente en el Foro Sol se unió para cantar al unísono, hasta que llegó uno de los temas más esperados, que incluso provocó llanto en algunas personas en las gradas: Everlong, con el que los Foo Fighters cerraron su concierto de viernes 13 en el Distrito Federal. Una fecha que sus seguidores ahora considerarán de buena suerte, a la espera de que Grohl y compañía vuelvan a tocar muy pronto en México, cuando tengan un nuevo disco, tal como lo mencionaron.













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